Retablo de Santa María Magdalena de la Iglesia de Matapozuelos (Valladolid)

El objeto tratado fue el retablo mayor de la Iglesia Parroquial de Matapozuelos. Esta obra, dedicada a la titular de la iglesia, Santa María Magdalena, se sitúa en el presbiterio y estada datada de finales del siglo XVI y principios del XVII. El retablo divide su espacio entre la predela, tres cuerpos y el ático, así como a través de cinco calles verticales separadas por columnas. Dentro de los relieves que pueblan las distintas partes del retablo, destacamos los relieves históricos atribuidos a Adrián Álvarez, las cuales representan escenas de la Anunciación, la Adoración de los Pastores, la Epifanía y la Presentación. En la parte central del primer piso se observa una escultura de Santa María Magdalena, la titular de la iglesia, y en la parte superior del retablo un Cristo crucificado, junto a otras escenas del Calvario.

ESTADO DE CONSERVACIÓN.

El origen de este retablo se encuentra en uno más pequeño que existía previamente y en el que se realizaron una serie de reformas en su traza para adaptarlo y ampliarlo. Algunas de las patologías existentes provienen de esa primera transformación de la obra, como los vencimientos y deformidades en la estructura del retablo, claramente observables en algunas partes, como en el coronamiento de ático o en los relieves del segundo y tercer cuerpo del retablo. La mala distribución del peso de los diversos elementos de la obra contribuyó a estas deformidades. También se descubrieron pérdidas de soporte y fragmentos mutilados, así como elementos añadidos a posteriori que afectaban gravemente al soporte de la obra, como clavos férricos. También se observaron patologías bióticas en la estructura, como ataques de insectos xilófagos que han perjudicado gravemente algunas secciones del retablo y fenómenos ambientales que contribuían al mal estado de la estructura.

En cuanto al estrato pictórico de la obra encontramos profundos levantamientos y desprendimientos por toda la superficie pictórica del retablo, además de suciedad superficial, polvo y falta de adhesión entre los distintos estratos pictóricos. También podemos apreciar la oxidación del barniz superficial, la existencia de numerosos repintes que recubren totalmente el oro y la policromía original en algunas secciones, así como la acumulación de cera y graves quemaduras producidas por velas. 

TRATAMIENTO

Los trabajos de restauración consistieron principalmente en labores de carpintería de restauración que permitieron solucionar los problemas estructurales de la obra, especialmente los graves vencimientos que afectaban al retablo. Se procedió a la instalación de nuevos anclajes en los cuerpos superiores y el ático, aprovechando para cerrar las separaciones existentes. Por otro lado, también se redistribuyó de manera más equitativa el peso de las áreas cedidas, como en las hornacinas centrales, siendo reajustadas mediante cuñas, o la talla central de María Magdalena, a la cual se le colocó una nueva base mixta  fijada al muro y al resto del soporte mediante una columna de madera. Para las pérdidas de soporte del retablo, se procedió a la reintegración de los volúmenes mediante reconstrucciones volumétricas y al enchuletado de las grietas de las esculturas y relieves de la obra.

La policromía y dorados del retablo recibieron un tratamiento consistente en la fijación y sentado del color con diversas técnicas. La limpieza mediante métodos no agresivos inferidos a través de cateados. Finalmente se aplicó una protección final que garantizase  la correcta conservación de los estratos pictóricos del retablo. También se ejecutaron diversos tratamientos curativos y preventivos antixilófagos, además de la protección y consolidación de la madera  para evitar nuevos ataques bióticos.

Como parte de los trabajos realizados en este retablo, se realizó un blog de restauración en el que se dan más detalles de este trabajo.